Es el último rumor que ha cobrado fuerza en las últimas fechas, y que le ha permitido a la firma canadiense recuperar algo de valor en la Bolsa tras llegar a mí­nimos de hace seis años. La compra por parte de Vodafone le permitirí­a a la compañí­a del Reino Unido reforzar su portfolio de móviles con una oferta propia de dispositivos BlackBerry, aunque de momento no existe ninguna confirmación sobre este interés por parte de una fuente oficial.

Más alla de la veracidad de este rumor, resulta sintomático que las acciones de RIM subieran un 14% en un solo dí­a después de que se conociera esta posibilidad. La independencia de la compañí­a canadiense no despierta ya confianza alguna en los inversores, y más después de que se presentaran los últimos resultados financieros de la empresa, que hablan de una facturación un 10% menor y unos beneficios que se han reducido a la mitad en un año.

Incluso uno de los dispositivos que llegó al mercado como la alternativa empresarial del iPad, el BlackBerry PlayBook, ha visto como su producción se ha reducido considerablemente, debido a las pobres ventas que ha experimentado. Toda esta situación forma un caldo de cultivo muy propicio a los rumores de ventas y reestructuración de la empresa, que en julio anunció que iba a despedir a una parte importante de su plantilla.

Así­ las cosas, los responsables de RIM ponen su confianza en los nuevos lanzamientos de la empresa, que han tenido una buena acogida entre el público. Lo que no está claro es que su relevancia sea lo bastante importante como para que la compañí­a pueda reflotar la nave. El modelo de los teléfonos inteligentes BlackBerry parece, a estas alturas, agotado. Roto por la fiera competencia que ofrecen Apple con su iPhone y el resto de los fabricantes con sus dispositivos Android. Una venta podrí­a ser la salida más digna que le quede a la empresa, sobre todo si su tendencia a perder usuarios en favor de otras marcas continúa.