Google evita pagar impuestos en España

El modo en el que el mundo financiero actual está estructurado revela grandes incongruencias. Paraí­sos fiscales, trampas legales y todo tipo de escondrijos y atajos dibujan un panorama que, en algunas ocasiones, resulta realmente indignante. Y, lo que es peor, afecta en último término a los ciudadanos. Desgraciadamente, ni siquiera las empresas que se empeñan en mostrarse como defensoras del bien común escapan a estos juegos. Y es que Hacienda ha estado investigando a Google por las declaraciones de impuestos que realiza Google España según publica El Paí­s.

Una filial que en 2010 declaró un negocio neto de 26 millones de euros y unas pérdidas de más de medio millón de euros. Visto así­ parecerí­a que Google tiene en España un agujero negro. Pero la realidad es que el negocio de Google en nuestro paí­s genera millones de euros. ¿Dónde está el truco? La empresa del buscador se acoge a la estructura legal de Irlanda para poder refacturar una gran parte del negocio generado en España en el paí­s británico.

Google evita pagar impuestos en España

De esta manera escapa a la necesidad de pagar una gran parte de los impuestos que le corresponderí­an de facturar en España al fisco de nuestro paí­s. Pero no sólo eso. La estructura legal en Irlanda permite alojar las ganancias en filiales exteriores y evitar así­ el gravamen del 12,5% que impone el paí­s. De nuevo, estas ganancias se alojan en paraí­sos fiscales como las Islas Bermudas, según publica el diario El Paí­s. Una manera de ahorrar mucho dinero (ya os contamos las prácticas de Google con anterioridad) pero que no está exenta de polémica por el prejuicio que causa al Estado.

Claro que los representantes de Google han esgrimido el servicio que aportan al paí­s a través de la creación de empleo y de la actividad económica que se genera alrededor del negocio de la empresa, pero este tipo de prácticas siguen siendo igual de indignantes por mucho que se las enmascare con otros beneficios sociales. Sea como fuere, es francamente improbable que exista algún tipo de multa o tirón de orejas por parte de Hacienda, ya que estas prácticas, aunque injustas, no atentan contra la legalidad de los paí­ses donde se producen estos atajos.