Microsoft ha hablado de sus planes con el próximo sistema operativo embebido de la compañía, el Windows 8 Embebido. Se trata de un sistema especial de Microsoft que se integra en diferentes dispositivos como equipaciones médicas o maquinaría de construcción. La compañía lanzará dos versiones de su sistema embebido, la versión profesional (Windows 8 Embebbed Professional) y la versión estándar (WIndows 8 Embebbed Standard), los dos compatibles con la arquitectura ARM.
La compañía estadounidense no ha dado detalles sobre las características que tendrá la nueva versión de su sistema embebido, aunque si ha adelantado que estará centrado en una «interfaz de uso natural», que es el pintoresco nombre que otorga Microsoft a los sistemas que se valen del tacto o de la voz para funcionar. Este es un giro que ha comenzado la empresa con Windows Phone 7 y sobre todo con Windows 8, donde realmente se comienzan a explotar las posibilidades de un entorno táctil.
Este giro de Microsoft se debe sobre todo a la importancia creciente de los tablets en el mercado, que han hecho reaccionar a una empresa atada de manera natural al escritorio tradicional (no en vano, sus dos principales fuentes de ingresos son Windows y Office). En el caso de su sistema embebido de Windows, Microsoft quiere extender su uso a nuevos dispositivos, aprovechando que los procesadores se vuelven cada vez más baratos y se pueden integrar en otro tipo de productos que no requieren de mucha potencia, como pueden ser las neveras o incluso los termómetros.
El mercado de sistemas embebidos mueve una cantidad de dinero muy grande, un billón de euros anuales, y además con gran capacidad de crecimiento. Según la analista IDC, esta cifra se doblará en 2015. Por otra parte. Microsoft presentará Windows 8 embebido en el primer trimestre de 2012. Se espera que el lanzamiento de su versión profesional llegue durante el trimestre siguiente a la salida al Windows 8 para PC y tablet, mientras que la versión estándar podría tardar hasta nueve meses más en aparecer.
