La crisis no perdona. Ni siquiera un campo tan necesario a priori como la seguridad informática (basta con ver el ritmo de crecimiento de nuevas amenazas) se libra. Una de las empresas españolas de seguridad con mayor renombre, Panda Security, ha anunciado hoy mismo la dimisión de su CEO actual y, lo que es más grave, un expediente de regulación de empleo que podrí­a afectar a 128 empleados. La mayorí­a de ellos serán ingenieros.

No es el primer recorte de la empresa, que durante los primeros meses del año ha ido despidiendo a empleados tanto en su sede de Madrid como en la sede de Bilbao, hasta un número superior a los cincuenta empleados. Panda Security ha decidido tomar medidas más drásticas y despedirá a 128 trabajadores, según se explica en el sitio de noticias dedicado a las finanzas Gananzia.com. Un recorte muy importante de la plantilla, formada por unos 700 trabajadores.

Además, la empresa ha decidido prescindir de los servicios de su CEO (o el empresario ha decidido marcharse), Juan Santana, que llevaba las riendas de la compañí­a desde hace tres años (llevaba en la compañí­a desde 2006). Este empresario habí­a sido elegido por una encuesta como uno de los empresarios de IT más influyentes de España, pero eso no ha bastado para enderezar el rumbo de una compañí­a que está sufriendo la feroz competencia que presentan los antivirus gratuitos y las otras compañí­as del sector.

El que era hasta ahora consejero de la empresa, José Sancho, se convierte en el nuevo CEO de Panda Security (la rapidez con la que se ha buscado sucesor  invitan a pensar que está decisión no ha tomado por sorpresa a la cúpula directiva). La intención de Panda es centrar sus productos cada vez en el entorno de la nube (Internet) y buscar nuevos mercados en los que pudiera conseguir una mejor posición.