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Dado que genera el 6% del tráfico en Internet y es centro de muchas miradas, era cuestión de tiempo que alguien comenzara a sospechar sobre las prácticas de Google. La omnipresente compañí­a se encuentra bajo investigación en Europa por presuntas prácticas monopolí­sticas, que estarí­a llevando a cabo a través de su buscador, principal actividad de las muchas donde la entidad ha penetrado. El asunto está ahora en manos de la Comisión Europea, el organismo que se encarga de regular dichas actuaciones.

La denuncia ha sido interpuesta ante la Unión Europea por tres empresas: Foundem, un servicio británico sobre comparativas de precios; ejustice.fr, un buscador francés orientado a temas legales; y Ciao, la guí­a alemana para compras online. Google, por su parte, desconfí­a de la legitimidad de las acusaciones porque cree que uno de sus competidores está detrás de todo. No en vano, Foundem forma parte de la organización ICOMP, fundada parcialmente por Microsoft, mientras que Ciao fue adquirida por los de Redmond en 2008.

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Las citadas entidades afirman que Google discrimina los resultados relativos a ellas. Creen que el algoritmo del afamado buscador califica con menor relevancia sus entradas porque los identifica como competidores. En el caso de Ciao, el portal ya habí­a presentado una denuncia ante las autoridades alemanas, relativa a los términos y condiciones del servicio AdSense.

A través de un comunicado, Microsoft segura que seguirá cooperando con las investigaciones del Gobierno alemán en las reclamaciones de Ciao (junto a otras compañí­as y asociaciones germanas). Por su parte, Google se defiende en su blog oficial: “Siempre escuchamos cuando alguien tiene una preocupación real, y trabajamos duro para poner por delante los intereses de los usuarios y competir justa y honestamente en el mercado”.

Actualmente las indagaciones se encuentra en fase preliminar. La Comisión se encargará de estudiar el mercado en cuestión y entrevistar a los implicados. Si se hallan indicios de estrategias desleales y comportamiento anticompetitivo por parte de Google, entonces darí­a comienzo la investigación a fondo.

Foto: Yodel Anecdotal / Ví­a: Macworld