Windows Phone 8

Parece que Microsoft ha decidido tratar de acaparar todos los focos esta semana. Tras la presentación de Microsoft Surface, su primer tablet propio que lucirá los sistemas Windows RT y Windows 8 Pro, la compañí­a ha dado un nuevo paso presentando las lí­neas maestras de Windows Phone 8, la siguiente versión de Windows Phone para teléfonos inteligentes. Esta nueva versión contará con una serie de novedades que se centrarán en ofrecer una mayor flexibilidad tanto a los desarrolladores de apps como a los fabricantes. Te contamos las principales novedades que ha presentado la compañí­a de Windows.

Lo primero que es necesario remarcar, y que puede generar no pocas crí­ticas, es que los móviles actuales con Windows Phone 7.5 no recibirán la actualización para Windows Phone 8. En su lugar, contarán con una versión intermedia que recoge algunas de las caracterí­sticas de este sistema operativo (Windows Phone 7.8). El primero de los cambios se producirá en la interfaz Metro, que se volverá más dinámica a través de animaciones mejoradas de sus bloques y mayor información.

Esta pantalla de inicio recuerda notablemente a lo que hemos visto con Windows 8. La explicación es sencilla. Se producirá una renovación completa del código fuente, que en muchos casos compartirá el código del propio Windows 8. Podrí­amos estar ante un primer paso para que se produzca una fusión completa de un solo sistema operativo para todos los dispositivos del mercado (ordenadores, portátiles, tablets  y smartphones). Además, esta similitud supone una ventaja para los desarrolladores que tendrán que realizar pocos cambios para adaptar sus apps a los dos sistemas.

Windows Phone 8

Por otra parte, Windows Phone 8 dará un paso adelante en cuanto a posibilidades de hardware se refiere, aceptando un mayor rango de caracterí­sticas técnicas. Esto supondrá un mayor margen de maniobra para los fabricantes, que podrán lanzar al mercado dispositivos más avanzados. Dos ejemplos de este mayor rango los podemos encontrar en el soporte para procesadores de más de un núcleo (un requisito clave si los equipos quieren competir con rivales de primer nivel como el Galaxy S3 o el próximo iPhone 5, y en la compatibilidad con pantallas de una mayor resolución.

Hasta ahora, los móviles con Windows Phone 7.5 debí­an tener una resolución estándar de 800 x 480 pixels. A partir de Windows Phone 8, el rango se ampliará a una posible resolución de 1.280 x 768 pixels o incluso una resolución de 720p de 1.280 x 720 pixels. Estas dos inclusiones supondrán un paso adelante del sistema de Microsoft. También se incluye la posibilidad de incorporar tarjetas SD dentro del móvil, otra de las limitaciones con las que cuenta el Windows Phone actual.

Dentro del campo profesional, también nos encontraremos con una serie de mejoras interesantes. La integración de Skype en el sistema será mucho mayor, por lo que podremos realizar videoconferencias con facilidad y llamadas a través de VoIP. Por otra parte, tendremos compatibilidad con BitLocker, una herramienta capaz de cifrar los datos de nuestro teléfono (archivos, imágenes o contraseñas, etc.).  Además, las empresas podrán crear tiendas de aplicaciones propias, sin tener que pasar por el Marketplace o plataformas para mostrar información relevante a sus empleados.

Por último, también hay que destacar que Microsoft tratará de aprovechar la tecnologí­a NFC (que permite los pagos a través de los móviles) con la creación de su propia herramienta de pago Microsoft Wallet. Esta herramienta competirá directamente con Google Wallet. De momento no tenemos datos concretos sobre la salida de Windows Phone 8, que Microsoft coloca entre el otoño y el invierno.