Según un estudio encargado por Google, las redes sociales suponen un estímulo muy importante a la hora de aumentar la productividad y las relaciones en el trabajo. La investigación trae una cuestión muy relevante dentro del panorama actual en el que nos movemos, ya que pone en duda la decisión de muchas empresas de limitar o suprimir por completo el acceso a las redes sociales de sus empleados durante las horas de trabajo, por razones de seguridad pero sobre todo por considerarlas una herramienta que merma la productividad de los profesionales.
El estudio, realizado por Millward Brown (a instancias de Google) investiga el impacto de las redes sociales en el trabajo dentro del marco de la Unión Europea, a través de encuestas en España, Reino Unido, Alemania, Italia, Países Bajos y Suecia realizadas a 2.700 profesionales. El primero de los datos interesantes que se deslizan del estudio es el alto porcentaje de ascensos recientes que han recibido los empleados que utilizan redes sociales de manera habitual (un 86%) frente a solo un 61% de los que no usan habitualmente estas herramientas en su puesto de trabajo.
También aumentan considerablemente las opciones de trabajar en empresas con alto indice de crecimiento respecto a los profesionales que no utilizan las herramientas sociales. Eso sí, de entre todos los encuestados, solo uno de cada cinco considera que la utilización de estas herramientas repercute de manera directa en su rendimiento.
Las redes sociales son un elemento a tener en cuenta a la hora de medir el grado de satisfacción de los empleados. Así, un 38% de los encuestados que utilizan las redes se muestran muy satisfechos con su trabajo, mientras que el porcentaje baja hasta el 18% entre aquellos que no las utilizan. Una idea que se refuerza a la hora de preguntarles a los profesionales si recomendarían a otro su trabajo, ya que el porcentaje es de un 64% de usuarios que utilizan lo social frente a un 42% que no.
Las principales ventajas que ofrecen estas herramientas según los profesionales que trabajan con ellas son la capacidad de encontrar gente, información o expertos de manera rápida con un 41% (sobre todo a través de redes de perfil profesional como LinkedIn), llevar a cabo trabajos de colaboración en la red con un 37% (una tendencia cada vez más extendida entre las empresas) y ampliar los círculos profesionales con un 34%.
Si nos fijamos en los datos del estudio recogidos en España, se mantiene la misma tendencia que en el resto de Europa. Así, nueve de cada diez encuestados que usan redes como Facebook o Twitter han sido ascendidos recientemente, frente a solo un 61% de los profesionales que no usan estas herramientas. El nivel de satisfacción crece hasta un 88% de los usuarios de redes sociales frente a un 65% de los no usuarios (llama mucho la atención este alto grado de contento con el trabajo frente a la media europea). El 65% de los usuarios recomendarían su empresa, frente a un 48% de los no usuarios.
En definitiva, un estudio interesante que debe llevar a reflexión a los directivos y a los responsables de IT de las empresas europeas sobre el peso creciente de las redes sociales. Hay que tener en cuenta que los profesionales escogidos durante el estudio pertenecen a empresas de más de 50 empleados, por lo que se deja a un lado a las Pymes más pequeñas que forman gran parte del tejido empresarial de un país.
