Para el que todaví­a no lo conozca, Google Docs es un conjunto de aplicaciones basadas en Internet de Google que tienen el objetivo claro de ser una alternativa válida a Office de Microsoft. Así­, Google Docs tiene un editor de textos, hojas de cálculo, presentaciones o formularios, entre otras herramientas. Además de ser gratuito fuera del ámbito empresarial, Google Docs cuenta con la gran ventaja de que surgen regularmente nuevas caracterí­sticas y novedades para completar estas aplicaciones en la red.

En este caso, se trata de una opción que mejora las posibilidades de compartir documentos en la red para realizar trabajo colaborativo (uno de los grandes atractivos de Google Docs es que permite trabajar de manera conjunta sobre documentos en tiempo real). Hasta ahora, el usuario podí­a establecer dos tipos de permiso para los usuarios con los que quiera compartir los documentos: «puede ver» y «puede editar».

Con la primera de las opciones los otros usuarios podí­an modificar los documentos y los cambios en tiempo real, y dejar comentarios sobre el desarrollo del trabajo (incluso se pueden realizar conversaciones entre los distintos usuarios). La segunda opción tan solo permite visualizar el contenido de los documentos, sin capacidad de cambiar ningún aspecto del mismo.

Google ha optado por introducir una tercera opción: «puede comentar». Con esta opción los usuarios tienen la posibilidad de dejar comentarios pero no pueden cambiar ningún aspecto del documento. Así­, los autores pueden recibir opiniones sobre su trabajo, pero sin que otros usuarios modifiquen sus archivos. A pesar de que cada vez se conoce más esta herramienta y de que supone una alternativa muy interesante a soluciones de pago como Office, su popularidad todaví­a es poca y cuenta con el rechazo natural de un importante sector de internautas que se muestran reacios a almacenar datos sensibles en la red, al menos por el momento.