Microsoft ha explicado su próxima estrategia en el mercado de los dispositivos móviles para avanzar en un mercado que se le resiste. Se trata de los nuevos sistemas operativos WIndows Embedded Handheld OS y Windows Embedded Handheld 7. Está previsto que Windows Embedded Handheld OS esté disponible en el plazo de seis meses.
Es un sistema operativo basado en la tecnología de Windows Mobile 6.5, con una clara orientación hacia la empresa. Según los primeros datos no va a aportar una diferencia sustancial respecto a su predecesor. El propósito de la compañía es simplificar el ciclo de actualizaciones y asemejarlo a los ciclos de otros tipos de dispositivos de Microsoft. Uno de los primeros móviles que sadrá con este sistema incorporado es el Smartphone ES400 de Motorola.
El salto de generación se producirá con Windows Embedded 7, que saldrá al mercado a lo largo de 2011. Todavía se conoce poco sobre este sistema. Steve Balmer, ejecutivo de Microsoft, explicó que el sistema operativo estará basado en Windows 7, y que contará con mejoras en la seguridad y la estabilidad.
Microsoft trata de asegurar un ciclo de vida más largo para los dispositivos móviles y las aplicaciones para empresarios y autónomos. El gigante norteamericano ha tenido muchos problemas para introducirse en el mercado de los dispositivos móviles y su crecimiento se ha ralentizado en los últimos años.