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Existen múltiples maneras de organizar las tareas, tanto a nivel personal como profesional. Desde la utilización de una simple agenda, la clásica servilleta garabateada que se une a otras tantas en el bolso de la chaqueta o cualquier programa CRM-ERP que se pueden encontrar en el mercado. Pero quizás estos sean sistemas demasiado «complejos» para llevar un control de las distintas fases en los que se divide un proyecto.

Todoist

Sencilla y rápida herramienta de control de tareas, muy adecuado para aquellos que no quieren o no se adaptan al método GTD desarrollado por David Allen y que actualmente está tan en boga. Ya que se ajusta a la perfección a aquellos usuarios que priorizan las tareas en base a las fechas lí­mite de ejecución de las mismas, mostrando desde un principio cuales vencen en el mismo dí­a y las que están programadas para fechas próximas.

La austera interfaz visual prescinde de florituras varias en pos de una presentación de los datos de una forma jerárquica con códigos de colores. Donde no sólo se puede realizar la clasificación por etiquetas, sino que se pueden agrupar un subgrupo de tareas dentro de un proyecto que abarque todas ellas. De tal forma que se puede realizar un control más detallado sobre las diferentes operaciones. Con el firme propósito de no dejar ningún cabo suelto, incrementando así­ la eficiencia del trabajo realizado.

todoist

Aunque muchos usuarios de la herramienta la han calificado como una de las mejores soluciones en el campo de la organización, también son muchos los que han intentado introducirla en su quehacer diario sin éxito. Debido en gran medida a un necesario periodo de adaptación y aprendizaje para poder exprimir todas sus funciones. Tanto es así­, que se hace necesario el aprendizaje de una serie de atajos de teclado para aprovechar toda su funcionalidad.

Sin embargo, Todoist puede servir, junto a Remember The Milk, como ejemplo de integración con todo tipo de aplicaciones que habitualmente son utilizadas por una gran número de usuarios. No en vano se puede integrar una barra de herramientas en el navegador Firefox, con Gmail o a través de los correspondientes widgets en iGoogle o Netvibes. Esa integración también puede ser llevada a cabo con numerosas herramientas de productividad como Launchy o QuickSilver para entornos PC y Mac respectivamente.

Algo esencial en estos tiempos, es poder consultar y realizar las pertinentes modificaciones cuando el usuario no sen encuentra ante un ordenador conectado a Internet. A tal efecto, Todoist permite el acceso desde dispositivos móviles además de facilitar aplicaciones nativas para usuarios de terminales con sistema operativo Android. Como no podí­a ser menos, el Apple iPhone también cuenta con su propia aplicación.

Sin embargo, y de forma totalmente inexplicable, Todoist se convierte en una herramienta muy eficaz para la organización individual, dado que no contempla ninguna de las facetas del trabajo colaborativo. Así­ pues, no es posible compartir tareas con otros usuarios del servicio. Algo totalmente inexplicable hoy en dí­a, tratándose de una herramienta de cloud computing.

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