Cae la tercera botnet mundial de enví­o de spam

Buenas noticias para todo el conjunto de los internautas del mundo. La tercera botnet o red zombie más importante de enví­o de spam o correo basura ha quedado inutilizada tras echar abajo el servidor central desde el que se llevaban acabo las operaciones de esta red. Después de esta caí­da, los cibercriminales tendrán que volver a reconstruir toda la red si quieren seguir adelante con estas actividades delictivas, por lo que podrí­amos tener varios meses de cierta tranquilidad en el enví­o mundial de spam.

El correo basura o spam es una de las grandes lacras que existen hoy en dí­a en Internet. Inunda los buzones de correo de casi todos los internautas y genera no pocas molestias. Además, un porcentaje de esos correos basura contiene archivos maliciosos o enlaces hací­a páginas alteradas que pueden dañar nuestro equipo. Eso sí­, los casos en que se enví­an correos maliciosos son un pequeño porcentaje del total. Normalmente nos encontramos con publicidad más o menos engañosa de todo tipo de productos, desde relojes, fármacos para mejorar el desempeño en la cama o alargadores del miembro viril.

Diariamente se enví­an miles de millones de correos de este tipo, lo que da una muestra de la cantidad de residuos electrónicos que deja el spam. Grum, la red criminal desmantelada, era responsable del enví­o de cerca del 18% de la cantidad total de correo basura del mundo, es decir, unos 18.000 millones de mensajes basura al dí­a. Los enví­os se realizaban a través de una botnet o red zombie, una red organizada de ordenadores infectados por malware que son los encargados de llevar a cabo la tarea de enviar correos electrónicos basura. La mayor parte de las veces los usuarios no son conscientes de que su ordenador forma parte de una red de este tipo, ya que el impacto en el rendimiento no suele ser notable.

Spam

Según se explica desde The New York Times, el cierre de Grum ha sido posible gracias al trabajo de varias organizaciones de seguridad a lo largo de Estados Unidos, Reino Unido y Rusia. Estos investigadores comenzaron a rastrear el origen de Grum hasta que encontraron los servidores maestros (desde donde se controla la red) en Rusia. Después alertaron a los proveedores de red para que echaran abajo esos servidores.

La buena noticia es que tal como estaba diseñada esta red, su actividad solo era posible si los ordenadores centrales estaban operativos, de manera que el malware distribuido por cientos de miles de ordenadores ha quedado inutilizado. Para volver a restablecer una red similar, los criminales deberán volver a construir desde cero una estructura infectando a miles de ordenadores. Una labor que permitirá que los niveles de spam bajen durante un tiempo. El problema de estas medidas es su carácter temporal. El tiempo de respuesta de los criminales suele ser muy rápido, y ya se ha visto otras veces que tras echar abajo una red de gran magnitud los niveles de enví­o de spam se restablecí­an en apenas unas semanas.