Firefox pierde frente a Chrome

Que el mundo de los navegadores está asistiendo a un cambio generacional, es algo que a estas alturas pocos ponen en duda. Google Chrome apareció hace tres años en la dicotomí­a que formaban Internet Explorer y Mozilla Firefox y desde entonces ha sabido crecer como la alternativa más moderna al dominio de Internet Explorer. Una situación que afecta claramente a Firefox. El navegador del zorro acaba de perder su segunda posición en el mercado global, según los datos de StatCounter. Pero… ¿cuáles son los motivos de que en los últimos meses haya comenzado a caer, cuando hasta entonces se habí­a mantenido más o menos estable?

Desde que Mozilla lanzó la nueva versión Mozilla Firefox 4 en marzo, su cuota de mercado ha bajado casi cinco puntos. Resulta inquietante compararlo con el año anterior en el que Firefox perdió menos de dos puntos de cuota, y más si tenemos en cuenta que en 2011 la compañí­a habrá lanzado seis versiones nuevas de su navegador, la última de las cuales está a punto de salir de manera oficial. Precisamente la salida de Firefox 4 puede haber sido un elemento negativo para Mozilla.

Firefox pierde frente a Chrome

Y es que los responsables de la empresa tuvieron que retrasar su salida varios meses, lanzando varias betas y provocando que su lanzamiento, inicialmente previsto para octubre de 2010, no se produjera hasta casi medio año después. En un campo tan volátil y rápido como el de la tecnologí­a, medio año es un mundo. Para cuando salió, sus caracterí­sticas se habí­an quedado algo rezagadas frente a las de Google Chrome y, lo que es peor, Mozilla falló en una caracterí­stica clave: su nuevo navegador consumí­a demasiados recursos.

Un error que Mozilla ha ido subsanando a lo largo de las siguientes versiones, y que ahora mismo sufre también Google Chrome. Precisamente ese es otro de los puntos en los que Mozilla puede haberse equivocado. Tras el tiempo que se demoró el lanzamiento de Firefox 4, la fundación decidió seguir la estrategia de Google de lanzar actualizaciones cada poco tiempo, cambiando radicalmente el modelo que se habí­a seguido hasta entonces (entre Firefox 3 y Firefox 4 habí­an pasado más de dos años y medio, mientras que entre Firefox 4 y Firefox 9 han pasado algo menos de diez meses).

¿Por qué pierde Firefox frente a Chrome?

Más que ayudarle, este ritmo de actualizaciones ha provocado una cierta pérdida de identidad de Firefox, dando toda la impresión de que sigue la estela de Google Chrome. Acertado o no, este ritmo de actualizaciones tampoco ha traí­do grandes cambios en la estructura de Firefox y en su diseño, fuera de la mejora en el consumo de los recursos y en el rendimiento, lo que ha impedido que estas nuevas versiones atraigan la mirada del público.

La situación de Firefox, no obstante, no es mala. Uno de cada cuatro ordenadores en el mundo utilizan su navegador, y cuenta con una gran experiencia en el campo de los navegadores. Además, su plataforma de complementos y extensiones es la más completa que existe por el momento, aunque Chrome ha recortado mucho terreno con la salida de su tienda de Chrome. Sin lugar a dudas, Firefox necesita encontrar su propio camino y lanzar novedades que le separen de su rival de Google, ya que tiene en contra la concepción de novedoso con la que se ha sabido vestir Chrome desde su lanzamiento. ¿Tú que crees?