Historial en Windows 8

Las copias de seguridad son una herramienta tan útil como poco utilizada. Permiten guardar versiones de datos importantes, ya sean personales o de trabajo, en caso de que se produzca algún tipo de error en el ordenador o suframos el ataque de una pieza de malware. No obstante, su uso está mucho menos extendido que el de los antivirus o los cortafuegos (según Microsoft, menos de un 5% de los equipos utilizan las herramientas de copia de seguridad y restauración de Windows 7). Quizás por ello, Microsoft ha decidido mejorar el rendimiento de Windows 8 con la inclusión de una herramienta mucho más ágil y cómoda con la que realizar las copias de seguridad de nuestros archivos personales.

La nueva opción «Historial» estará integrada dentro del explorador de Windows 8 (en la app de escritorio). Esta herramienta rastrea el sistema varias veces al dí­a para buscar todos los cambios que se hayan realizado en nuestros archivos personales y los almacena en una unidad externa que hayamos escogido. Por defecto, la aplicación de copias de seguridad estará inhabilitada. Para activarla, tenemos que ir al explorador de Windows y apretar sobre la opción «Historial» o «History» que aparece en la parte superior de la ventana. Después deberemos apretar sobre «Configure File History Settings» y después «Turn on». Esta herramienta es capaz de guardar los datos personales de nuestras bibliotecas de archivos (documentos, imágenes, música y ví­deo) y también con el sistema de almacenamiento online SkyDrive. Esta segunda opción solo estará disponible en caso de que hayamos descargado la aplicación para escritorio de esta plataforma para guardar nuestros archivos en la nube.

Windows 8 File History

Para llevar a cabo el guardado de los archivos se puede escoger entre una partición del disco diferente (o un disco duro diferente) a la que tiene instalado Windows 8 o una unidad extraí­ble como por ejemplo una memoria USB. Podemos escoger la unidad en cuestión a través de la opción «Select Drive». A través de «Advanced Settings» podemos establecer el intervalo de tiempo en el que se llevan a cabo las copias de seguridad (desde cada 10 minutos hasta una vez al dí­a) o el tiempo que queramos guardar las versiones de los ficheros. Para borrar versiones antiguas presionamos sobre «Clean up versions».

En el caso de que existan carpetas de las que no queramos guardar los cambios hacemos click sobre la opción de configuración «Exclude folders» y luego escogemos aquellas carpetas no deseadas a través del botón «Add». Lo malo es que la exclusión de las carpetas se realiza una tras una, lo que puede llegar a resultar tedioso si tenemos muchas carpetas que no queremos guardar. Una vez que hayamos guardado nuestros datos, podemos acceder a las diferentes versiones de archivos guardadas a través de la opción «Restore personal files».

Esta es una de las partes más atractivas de la herramienta ya que nos permite revisar los archivos de las diferentes versiones accediendo a ellos en una vista similar a la del explorador, y visualizar las fotos y documentos para escoger si queremos restaurarlos. En cualquier momento, podemos restaurar los archivos deseados o carpetas haciendo click con el botón derecho del ratón en la carpeta o archivo y luego «Restore» o «Restore to» (en el caso de queramos tenerlos en una carpeta diferente). Podemos añadir cualquier carpeta que deseemos salvar a nuestras librerí­as.

En definitiva, estamos ante una herramienta que todaví­a presenta algunos problemas a la hora de funcionar, pero que si se mejora para la versión final podrí­a convertirse en una herramienta de seguridad muy utilizada por su sencillez y comodidad.

Para llevar a cabo este artí­culo hemos utilizado un portátil Acer Aspire Ethos 8951G, uno de los portátiles más potentes que hay en el mercado y que cuenta con un procesador Intel Core i7-2630QM con cuatro núcleos de procesamiento y una potencia de 2 GHz por núcleo. Además, este equipo tiene 16 GB de RAM y una tarjeta gráfica Nvidia GeForce con 2 GB de memoria dedicada.